Paola Jirón es la presidente selecta del nuevo Consejo Nacional de Desarrollo Territorial de Chile (CNDT), una reciente entidad que fusiona el Consejo Nacional de Desarrollo Urbano (CNDU) y el Rural (CNDR), asumiendo el reto de promover una planificación que tome en cuenta las características específicas de cada región, y facilitando conversaciones para elaborar soluciones que aborden problemas territoriales como el incremento de la población en campamentos, el desarrollo urbano en áreas de riesgo de desastres y la creciente subdivisión de tierras rurales.
Jirón, graduada de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile (FAU), cuenta con experiencia internacional en discusiones sobre urbanismo, movilidad y asentamientos humanos. Dentro del documento expuesto por el Gobierno de Chile, la presidente de CNDT habla de su compromiso en la administración del desafío que existe actualmente en Chile respecto al urbanismo, en temas como los asentamientos irregulares y los lotes "brujos", tópicos en actualmente debate.
Dentro de los proyectos futuros, Paola Jirón habla de una actualización en la Política Nacional de Desarrollo Urbano, que adopte un enfoque integral y completo en la planificación del territorio que supere la distinción simplista y binaria entre lo urbano y lo rural.
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¿Densificar Santiago? Las opiniones contrarias de expertos sobre arquitectura y urbanismoRespecto a este último punto, la creación del CNDT y la incorporación de Paola Jirón al mandato de planificación urbana, podría significar grandes cambios en la temática hoy controversial, la subdivisión territorial de espacios rurales, sobre todo en el sur de Chile. El presente año el gobierno decidió aumentar las penas a las entidades e individuos que realicen subdivisiones a territorios rurales agrícolas, para destinarnos a fines diversos, cómo se acostumbra, a condominios residenciales.
En base a esto, diversos expertos han emitido opiniones respecto al uso territorial, como sucede con Pablo Allard y la entrevista que dio al medio País Circular, donde expresa su disgusto con la subdivisión en base a construcciones agresivas con el medio ambiente, sin embargo, vela por el desarrollo eficaz y útil para diferentes locaciones según cualidades específicas.
Dentro de la misma entrevista, Allard habla de un problema fundamental, el cual se relaciona al sistema regulador urbano del país, específicamente a la segregación de los territorios urbanos y rurales, y la no distinción de espacios externos a estos términos. En este sentido, su opinión se asemeja a la recientemente expuesta por la nueva presidenta del Consejo Nacional de Desarrollo Territorial.
